INTRODUCCIÓN

El presente artículo se centra en uno de los elementos o fundamentos tácticos individuales ofensivos dentro del fútbol, como es el desmarque en sus distinta opciones o posibilidades, con especial orientación a las etapas de iniciación deportiva.

En este sentido, se considera que el fútbol base es el momento que se produce desde que un niño/a se inicia en el fútbol, considerándose que comprende desde las 5-6 años hasta llegar a los 16, aproximadamente (Pérez & Domínguez, 2015).

Para ello se plantean los fundamentos del desmarque, tipos y características y formas metodológicas para desarrollar este concepto ofensivo individual con el fin de conseguir que el aprendizaje se adecue a las edades propias de la iniciación deportiva.

FUNDAMENTACIÓN DEL DESMARQUE

El desmarque se puede reconocer como uno de los conceptos más importantes de la táctica individual ofensiva, además de uno de los más influyentes en lo que respecta al juego colectivo, debido a que nos permite la ocupación de espacios libres útiles. Continuando con esta misma idea Sans y Frattarola (2000) definen los desmarques como: “la acción de distanciarse del contrario que nos marca hacia un espacio libre determinado, para recibir el balón con ventaja”. 

En este sentido, aparece un aspecto muy importante que no se debe pasar por alto, y es la situación en la que el jugador se tiene que encontrar momentos antes de llevar a cabo la acción, y es que, valga la redundancia, un desmarque siempre ocurre cuando el jugador se encuentra marcado, de este modo para Castelo (1999) no es más que “el concepto ofensivo que permite al atacante sin pelota liberarse del defensor inmediato, tratando de minimizar el éxito de la acción defensiva y obtener ventajas espacio-temporales, ofreciendo soluciones al poseedor”. En esta definición ofrece otro punto importante del desmarque, siempre lo realizará el atacante que no este en posesión del balón.

Ahora bien, este concepto también está íntimamente relacionado con los principios generales en la acción del juego durante el ataque; conservar el balón, progresar con el balón o intentar marcar gol, y que, su buena ejecución influirá de manera supeditada en el devenir de las futuras acciones. Referente a esto, para López (2003) “el desmarque representa una acción fundamental para desarrollar un juego colectivo al dotar de un mayor número de posibilidades de envío del balón al poseedor del mismo, ya sea para iniciar, elaborar o finalizar las acciones ofensivas”.

No solo sirve de ayuda a nivel ofensivo, sino que también dificulta las labores defensivas, permitiendo que los espacios creados por estos desmarques hagan que los jugadores adversarios tengan dificultades para marcar a sus respectivos jugadores de ataque, imposibilitando la cobertura defensiva mutua (Worthington, 1974). Por último, este concepto lo puede realizar cualquier jugador y en cualquier parte del terreno de juego, siempre que se cumplan las condiciones ya mencionadas.

TIPOS DE DESMARQUES

El desmarque tiene varios tipos, incluso en estos últimos años existen nuevos tipos o nomenclatura, si bien en este caso nos centramos en los dos tipos de tradicionales que existen y que ya sea de forma individual o de forma colectiva agrupan a muchos de los tipos más actuales, especialmente al mezclar ambos tipos, en concreto son de apoyo y de ruptura.

1. Desmarque de apoyo: 

Se realiza cuando se ofrece ayuda a un compañero que se encuentra en posesión del balón, facilitándole la acción, sin superar su posición ni se reduce la distancia hacía la portería contraria. Según López (2003) los desmarques de apoyo pueden ser de tres tipos o formas:

• Apoyo frontal.

• Apoyo lateral o diagonal.

• Apoyo por detrás. Este tipo de acciones ofensivas presentan las siguientes consideraciones a realizar por el jugador o jugadores, utilizándolo para:

• Conservar la posesión del balón, un resultado favorable.

• Controlar el juego.

• Sorprender al contrario con cambio de ritmo y de orientación, y posteriormente con otro tipo de desmarques.

• Atraer al contrario e intentar salga de sus posiciones retrasadas y ofrezca espacios por donde intentar las penetraciones. Además, presenta los siguientes objetivos (abfutbol, 2007):

• Dar soluciones al poseedor del balón.

• Asegurar la posesión del balón.

• Poder jugar el balón con seguridad y precisión.

• Lograr superioridad numérica en la zona del balón.

• Crear espacios libres (con movimientos de arrastre del rival)

• Construir las fases de iniciación

y elaboración del ataque combinativo.

• Iniciar y crear el contraataque elaborado.

• Mantener y conservar la posesión del balón.

2. Desmarque de ruptura: 

Cuando se supera la posición del compañero con balón, o bien se reduce la distancia con la portería adversaria desbordando al marcador y buscando progresión. Del mismo modo que el desmarque de apoyo, este tipo de acciones ofensivas presentan las siguientes consideraciones a realizar por el jugador o jugadores, utilizándolo para:

• Otorgar progresión y profundidad a nuestro juego ofensivo.

• Dotar de mayor velocidad a nuestro juego.

• Intentar llegar en condiciones óptimas a la portería adversaria, alcanzando buenas situaciones de remate. 

• Generar espacios al poseedor del balón al atraer a la defensa en dirección a su portería. 

Además, presenta los siguientes objetivos (abfutbol, 2007):

• Facilitar la creación del juego del poseedor del balón.

• Ocupar y aprovechar los espacios.

• Favorecer el juego en el espacio lejano.

• Progresar en el ataque o contraataque.

• Finalizar los ataques o contraataques.

Estos dos tipos de desmarque se pueden dar de forma consecutiva uno tras otro, encadenando distintos desmarques, dependiendo del objetivo que estemos persiguiendo. De esta forma un jugador/a puede realizar un desmarque de apoyo y a continuación uno de ruptura y viceversa, como se puede ver a continuación.